Bankinter suma 103.000 clientes en el primer año de vida de 'bk', la línea comercial para jóvenes puesta en marcha por el banco para ofrecer productos y servicios financieros específicos para clientes con una edad hasta 35 años. Estas cifras, que el banco alcanza al cierre de octubre, confirman la buena evolución de un proyecto mediante el cual Bankinter busca ampliar su base de clientes de menor edad, apostando por la digitalización, la formación financiera y productos de valor.
Esta línea de negocio, que cuenta con un espacio propio en la web y en la app del banco, está dirigida a tres colectivos distintos: hijos de clientes del banco menores de edad, universitarios con edades entre los 18 y 24 años, y jóvenes profesionales de hasta 35 años. Para cada tramo de edad, la entidad ha diseñado un portfolio adaptado de productos de ahorro e inversión, financiación, medios de pago, así como programas de descuento y actividades formativas de iniciación en el conocimiento bancario y de los mercados financieros.
Para el grupo de los más jóvenes, hasta 18 años, el banco ha creado 'bk mini', con productos muy sencillos como una cuenta y una tarjeta de debido con control de gasto a disposición de los padres, así como planes de ahorro para que estos puedan planificar económicamente determinados proyectos de futuro para sus hijos, como el de sus estudios.
Con el fin de iniciar a los más jóvenes en conceptos básicos bancarios, como los gastos e ingresos y el ahorro, los padres podrán proporcionar a sus hijos claves consultivas de las cuentas, establecer un ingreso regular a través del servicio ‘Bk paga’, o acceder todos ellos a un juego de educación financiera, denominado “Money Town”, diseñado para aprender estos conceptos.
Por su parte, los jóvenes mayores de edad tienen a su disposición 'bk joven', con dos colectivos diferenciados: el de universitarios entre 18 y 24 años y el de profesionales menores de 35 años. Ambos grupos disponen de productos adaptados, como las cuentas bk Joven y bk Nómina, tarjetas y, en el caso de esta última cuenta, con la posibilidad de domiciliar ingresos y gastos obteniendo, al mismo tiempo, una remuneración.
Para el público de jóvenes universitarios, el banco ha diseñado un juego de iniciación en el mundo de la renta variable, denominado “Game of Traders” que, en su primera edición, ha contado con más de 2.500 participantes de más de 80 instituciones y centros universitarios españoles. Se trata de un juego de bolsa, con un gran componente formativo, que cuenta con una plataforma gráfica para operar como un auténtico trader. Gracias a este juego, los participantes, sin experiencia previa en su mayoría, han podido iniciarse en el mundo de la inversión en un entorno que simula en real la evolución de los mercados.