Si Bankia finalmente es absorbida por CaixaBank, esta última, como entidad compradora, se encargará de comunicar a los clientes de la primera todos los cambios que puedan afectarles, entre ellos las condiciones de algunos productos, como cuentas corrientes o fondos.
Según explica el Banco de España en el Portal del Cliente Bancario, sin mencionar el nombre concreto de ninguna entidad, el banco resultante podría cambiar las condiciones de algunos productos de duración indefinida, como una simple cuenta corriente.
En el caso de que dichas condiciones sean más favorables, se aplicarán de forma inmediata, y si empeoraran, el cliente deberá ser avisado con dos meses de antelación para que pueda cancelar el contrato sin coste si las nuevas condiciones no le satisfacen.
Un aspecto importante es el del ahorro, pues, como recuerda el Banco de España, los clientes que tengan su dinero en ambas entidades deben tener en cuenta que el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) cubre un máximo de 100.000 euros por titular, por lo que quienes superen esa cifra deberían abrir cuenta en otro banco.
Para los productos con fecha de vencimiento -seguros o fondos-, se suelen mantener las condiciones iniciales hasta que finaliza el plazo, y después, la nueva entidad puede modificarlas.
En el caso de un préstamo o una hipoteca, los clientes no percibirán ningún cambio y seguirán abonando la deuda a la nueva entidad.
Otro cambio es el del número de cuenta, que pasará a estar encabezado por el identificador de la nueva entidad, que será la encargada de comunicar el cambio a los clientes y también de gestionar los pagos y recibos domiciliados que tengan.
También deberá informar a los clientes, en el caso de que cierre su oficina, de cuál se les asigna y realizar todas las gestiones necesarias para el cambio.