Caja Rural Regional celebró este sábado su asamblea general ordinaria, en su sede central de Fuente Alamo. El presidente de la caja, Juan Andrés Jiménez Muñoz, y el director general, José González Campillo, han hecho públicas las cuentas anuales y el informe de gestión de la entidad de 2018, que fueron aprobadas por unanimidad.
Entre los datos más relevantes, se informó a los socios que Caja Rural Regional ha finalizado el ejercicio 2018 con un crecimiento del volumen de negocio del 3,66%, lo que ha permitido que la cuota de mercado presente un importante aumento. El crédito a la clientela ha aumentado un 5,9%, llegando a los 132,9 M€ y está en consonancia con la estrategia iniciada por la caja. El importe de los depósitos disminuyeron un 1,6%, situándose, en los 252 M€, pero los productos fuera de balance aumentaron un 23,65%.
El beneficio de la caja ha crecido un 5,60% respecto a 2017, y la cobertura de insolvencia se sitúa en el 70%. El ratio de solvencia total se situó en el 19,14%, es decir, más del doble de lo requerido por el Banco de España.
El presidente de la caja destacó que "la caja es la única entidad de capital murciano. 2018 ha sido un año caracterizado por la competencia entre entidades por el crédito solvente, la presión regulatoria que no cesa y la baja rentabilidad del negocio bancario".
Caja Rural Regional de Murcia cuenta con más de 6.300 socios, 22.000 clientes y 53 años de existencia. Forma parte del Grupo Caja Rural, el cual cuenta con el apoyo para el desarrollo de su actividad, de determinadas entidades participadas: el Banco Cooperativo Español, la Sociedad Rural Servicios Informáticos y holding de empresas que forman Seguros RGA.
Entre otros de los acuerdos adoptados, se nombró como presidente de la Fundación Caja Rural Regional, a Antonio Arroyo Solano.