Iberdrola ha suscrito con 21 bancos una nueva línea de crédito ligada a indicadores de sostenibilidad por valor de 2.500 millones de euros con precios similares a los de su última operación de este tipo en marzo de 2019, antes de que estallara la pandemia de la covid-19.
Según ha informado este miércoles la compañía, la línea suscrita tiene una duración de cinco años ampliables en otros dos y carácter multidivisa.
En marzo de 2019, Iberdrola cerró la firma de un crédito sindicado multidivisa por importe de 1.500 millones de euros y ligado a criterios de sostenibilidad.
La operación se cerró entonces con condiciones ventajosas, al volver a niveles anteriores al inicio de la crisis financiera de 2008, pues el diferencial obtenido podía ser de hasta 23,5 puntos básicos sobre el índice de referencia (ibor) frente a los 27,5 puntos básicos de la línea de crédito que suscribió Iberdrola en enero de 2018.
La línea de crédito que suscribe ahora Iberdrola está sujeta a dos indicadores de sostenibilidad relacionados con el ámbito medioambiental y social.
El margen de la operación puede ajustarse de forma anual a la baja, en caso de cumplir con los indicadores, o al alza, si se incumplen.
El primero de los indicadores está relacionado con la reducción de la intensidad de emisiones por parte del grupo, en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible 7 (acceso a una energía asequible no contaminante) y 13 (medidas para combatir el cambio climático) de la ONU.
Iberdrola se ha fijado como objetivo que sus emisiones directas de CO2 sean inferiores a 70 gramos por kilovatio hora (KWh) producido en 2025 y en 2020 ya logró situarlas en 98 gramos/KWh.
El segundo indicador al que está sujeto la línea de crédito está asociado al aumento de mujeres en posiciones de liderazgo en la compañía.
Iberdrola se ha propuesto que el 30% de este tipo de puestos en 2025 estén ocupados por mujeres, en línea con el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 5 de la ONU, relacionado con la igualdad de género.
La eléctrica y los bancos prestamistas han introducido, además, un tercer factor de sostenibilidad, por el que cada año Iberdrola hará una aportación económica a un proyecto sostenible, cuya cuantía anual variará según el grado de utilización de la línea. La iniciativa se definirá en 2022 y la primera contribución se realizará en 2023.
En la operación, BBVA ha actuado como banco agente y coordinador en materia de sostenibilidad, junto con Unicredit. Iberdrola, que tiene el objetivo de que el 100% de sus líneas de créditos sean verdes o sostenibles en 2025, alcanza ya el 90%.
La compañía ya cerró en 2018 la mayor operación de crédito bajo criterios de sostenibilidad en el mundo, por importe de 5.900 millones de euros. Iberdrola, que fue la primera empresa española en abrir el mercado de emisión de bonos verdes, es en la actualidad el primer grupo del mundo en emisión de este tipo de bonos. En 2016, fue la primera energética en suscribir un crédito verde por importe de 500 millones de euros.
Actualmente, el grupo cuenta con financiación verde o ligada a criterios de sostenibilidad por importe de más de 32.000 millones de euros, de los que más de 13.000 millones corresponden a bonos verdes, y el 90% de sus líneas de crédito incorporan ya este tipo de criterios.