lunes. 25.11.2024

Repsol arranca las obras en Cartagena de la primera planta de biocombustibles avanzados de España que la compañía está construyendo en la refinería y que supone una inversión de 200 millones de euros.

 

Para supervisar este inicio ha visitado los trabajos el presidente de la compañía, Antonio Brufau, que ha estado acompañado del director de la refinería, Antonio Mestre, la alcaldesa de la ciudad, Noelia Arroyo, el presidente regional, Fernando López Miras, el delegado del Gobierno, José Vélez y otros representantes de la

administración regional, local y de entidades empresariales.

 

El proyecto de Repsol permitirá suministrar 250.000 toneladas al año de biocombustibles avanzados, como biodiésel, biojet, bionafta y biopropano, que podrán usarse en aviones, barcos, camiones o coches sin necesidad de hacer modificaciones en los motores. Estos ecocombustibles se producirán a partir de residuos y su uso permitirá reducir 900.000 toneladas de CO 2 al año.

 

El Presidente de Repsol ha asegurado que “Cartagena se va a consolidar con este proyecto como un centro de abastecimiento de productos fundamentales para el presente y para el futuro, y en un ejemplo del compromiso de Repsol con la movilidad sostenible”.

 

Antonio Brufau ha destacado la importancia de apostar por la neutralidad tecnológica para avanzar en el objetivo de alcanzar las cero emisiones netas en 2050, y ha solicitado a las administraciones públicas “una regulación habilitadora, facilitadora, flexible y no excluyente” que posibilite el desarrollo de proyectos de futuro, ya que, solo así, “estaremos protegiendo nuestra economía, la industria y el empleo”.

 

Por su parte, el presidente del Gobierno Regional, Fernando López Miras, ha afirmado que “Repsol es apuesta por el progreso, por el desarrollo y por la sostenibilidad. Cartagena y Repsol han crecido yendo juntos de la mano, tanto que no es posible entender el desarrollo de Escombreras y su conversión en un polo energético mundial sin Repsol. Y ahora, a ello sumamos una buena noticia, como es la construcción de la primera planta de biocombustibles avanzados de España, una planta de vanguardia que es un magnífico ejemplo de lo que hoy es la llamada economía circular”.

 

El Delegado del Gobierno en la Región de Murcia, José Vélez, ha señalado que “con la construcción de esta primera planta de combustibles avanzados, Repsol será una vez más, una de las grandes empresas de la Región canalizadora de empleo de calidad y potentes inversiones, situando a la Región a la vanguardia tecnológica”.

 

La alcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, considera que “lo que hoy comienza es otra gran apuesta industrial de Repsol en Cartagena, por la inversión que representa, el empleo que genera y por la actividad que va a suponer dentro del Valle de Escombreras”. Además, ha destacado que “ejemplifica la aplicación industrial de la investigación más vanguardista en materia de generación de combustibles mediante el reciclado”.

 

Sobre el proyecto, el Director de la refinería de Repsol en Cartagena, Antonio Mestre, ha destacado que la nueva planta “es un ejemplo tangible de economía circular que permitirá ofrecer soluciones de movilidad sostenible a todos los sectores de la sociedad, y un paso muy importante en la transformación del complejo industrial como polo multienergético”.

 

ECONOMÍA CIRCULAR. Repsol incorpora biocombustibles a sus carburantes de automoción desde hace más de dos décadas. Ahora da un paso más y, empleando como herramienta la economía circular producirá biocombustibles avanzados a partir de distintos tipos de residuos de la industria agroalimentaria y otros, como aceites de cocina usados. De esta forma, Repsol consigue dar una segunda vida a residuos que de otro modo acabarían en un vertedero y los transforma en productos de alto valor añadido.

 

El proyecto se está desarrollando en cuatro áreas diferentes que abarcan una superficie de 41.500 m 2 . Tres de ellas se ubican en el interior de la refinería y corresponden con la unidad de hidrotratamiento, la unidad de producción de hidrógeno y el área de depósitos para el almacenamiento de los biocombustibles. La cuarta zona se ubica en las instalaciones de la Autoridad Portuaria de Cartagena, donde opera Repsol. En esta área se habilitarán las infraestructuras necesarias para el almacenamiento de las 300.000 toneladas anuales de los distintos tipos de residuos que llegarán por vía marítima, y su posterior suministro al mercado nacional o de exportación.

 

Tras los trabajos previos de desmantelamiento de las instalaciones en desuso en el interior de la refinería para

albergar las nuevas unidades −con el desmontaje de 53.000m 3 de terreno−, en la actualidad las tareas se centran en trabajos de obra civil. En concreto, ya han comenzado las obras para la construcción de los depósitos que almacenarán los biocombustibles avanzados. En las áreas donde irán ubicadas las plantas de hidrotratamiento e hidrógeno, ya se están desarrollando trabajos de obra civil relacionados con la instalación de estructuras de hormigón y la colocación de racks para las tuberías por las que se desplazarán las materias primas y los biocombustibles avanzados.

 

240 EMPRESAS AUXILIARES TRABAJARÁN EN LAS OBRAS. La ampliación de las instalaciones de la refinería de Cartagena para construir la nueva planta de biocombustibles avanzados, que estará dotada de tecnología de vanguardia, va a suponer la generación de unos 1.000 puestos de trabajo en las diferentes fases del proyecto y la implicación de 240 empresas auxiliares, de las que el 21% serán locales, el 25% regionales, el 42% nacionales y el 12% internacionales.

 

En la actualidad ya se encuentran trabajando en el interior de la refinería más de 25 empresas contratistas y unas 300 personas. La cifra se irá incrementando hasta llegar a los 600 empleados de media, previendo que la punta se alcance el próximo otoño con unos 800 trabajadores, entre directos e indirectos.

 

LA REFINERÍA, REFERENTE EN EUROPA. Desde que se pusiera en marcha el proyecto, Repsol ha destinado más de 72 millones de euros a trabajos previos de ingeniería, encargo de equipos y mano de obra de empresas auxiliares.

 

La refinería de Cartagena es uno de los principales motores económicos y de generación de empleo de la Región de Murcia. En el complejo industrial trabajan cerca de 900 personas con una elevada cualificación que desempeñan su trabajo en puestos muy especializados. Además del empleo directo, la refinería genera unos 400 puestos de trabajo a través de empresas contratistas de manera recurrente, elevándose esa cifra hasta los 2.000 para acometer proyectos puntuales.

 

Repsol ha invertido en Cartagena más de 456 millones de euros en los últimos diez años. A esta cantidad, hay que sumar el proyecto de ampliación de la refinería, inaugurado en 2012 por el Rey Felipe VI, entonces Príncipe, y que supuso la mayor inversión industrial realizada en España, por valor de 3.200 millones de euros, situando al complejo a la vanguardia tecnológica en su sector. Hoy en día, la refinería de Cartagena es un modelo industrial de referencia y se encuentra entre las instalaciones más eficientes de Europa.

 

Actualmente, el complejo industrial de Cartagena afronta una transformación que supondrá una evolución de sus procesos para convertirse en un polo multienergético capaz de producir multitud de productos con baja, nula o incluso negativa huella de carbono. Para ello, Repsol empleará todas las tecnologías disponibles como hidrógeno renovable, economía circular y captura y uso de CO 2 , y se apoyará en distintas herramientas, entre las que se encuentran la digitalización y la eficiencia energética.

 

Sólo en 2021, durante los trabajos de mantenimiento en las unidades de lubricantes y en la última parada programada llevada a cabo en las áreas de conversión e hidrotratamiento, Repsol ha invertido 31 millones de euros en proyectos para mejorar la eficiencia energética de sus instalaciones en Cartagena.

Repsol arranca la construcción de la primera planta de biocombustibles avanzados de España