Baraka Capital Group, la empresa del murciano Trinitario Casanova, ha llegado a un acuerdo con los reversionistas de los terrenos de Chamartín, propietarios iniciales, a quienes ha comprado su derecho de reversión para desarrollar 1,2 millones de metros cuadrados.
Los reversionistas de Chamartín son los propietarios originales de los terrenos a los que Renfe expropió en su día para construir la estación de trenes en esa zona de Madrid. A pesar de la expropiación, esos propietarios seguían manteniendo derechos sobre esos terrenos en caso de revertirse su uso como estación de tren.
En total, hay unas mil familias 'reversionistas', y la operación es de 1,2 millones de metros cuadrados, por los que Casanova ha pagado 400 millones de euros. Gracias a esta operación, Trinitario Casanova se convierte una vez más en el protagonista de la mayor operación inmobilaria de la actualidad, como ya ocurrió hace un par de años cuando compró el Edificio España, en el corazón de la capital de España.
Ahora queda poir saber qué hará Baraka con estos terrenos: si promover ella misma su desarrollo o interntar otra operación en los próximos meses.