viernes. 22.11.2024

Los grupos mayoritarios del Parlamento Europeo han reclamado a la Comisión Europea que actúe con urgencia y plantee cambios en el diseño de los mercados energéticos europeos ante el incremento en los precios que en muchos países se está traduciendo en picos preocupantes en la factura final de hogares y empresas.

 

El Parlamento Europeo no emitirá, sin embargo, una resolución conjunta que recoja la posición común de la Eurocámara ante la crisis del aumento de precios y las medidas que deben ponerse en marcha, ya que solo los socialdemócratas y la Izquierda han respaldado este documento y el resto de grupos han mostrado su oposición.

 

Desde el grupo popular, el rumano Siegfried Muresan instó inicialmente a investigar las causas del incremento de precios y, en concreto, reclamó que la Unión Europea determine si «alguien» como la compañía gasística rusa Gazprom o el propio Gobierno de Rusia «ha manipulado el mercado en las últimas semanas y meses», un acto que «habría que sancionar» de llegar a confirmarse.

 

En cualquier caso, subrayó el apoyo de su grupo a ideas que han sobrevolado la Comisión Europea en las últimas semanas, como la propuesta para la adquisición conjunta de gas o la de instalaciones para el almacenamiento común de este recurso, impulsada por España, y pidió que la Unión Europea reduzca su dependencia energética y mejore su seguridad en este ámbito.

 

La jefa de los socialdemócratas europeos, la española Iratxe García, puso el acento sobre la urgencia que viven ya muchas familias en la Unión Europea y pidió que Bruselas desarrolle un plan para que los Estados miembros puedan coordinarse en reaccionar en periodos de gran estrés para el mercado, negociar juntos «como hemos hecho para la compra de vacunas» y una plataforma para la distribución de recursos según las necesidades.

 

El eurodiputado liberal español Luis Garicano criticó que en España «unas pocas compañías eléctricas se repartan el mercado y abusen de los consumidores» a cambio de puestos en sus consejos de administración, una práctica de la que acusó directamente al PP y al PSOE y, en concreto, al socialista Antonio Miguel Carmona, nombrado esta semana vicepresidente de Iberdrola España.

 

En los Verdes, Jordi Solé (ERC) rechazó que el sistema de comercio de emisiones sea el principal factor del alza en el precio de la electricidad y apuntó en su lugar al incremento en el precio del gas; también coincidió con Bruselas en que «la mejor manera de rebajar los precios es acelerando el despliegue de las renovables» y pidió «más medidas y recursos sociales para proteger a los hogares más vulnerables ante los precios disparados».

 

Dentro del grupo de la Izquierda, Sira Rego (IU) reclamó a la Comisión una revisión del mercado marginalista de la electricidad para evitar que «el kilo de azúcar se cobre a precio de kilo de caviar» y advirtió de que la alternativa es «no hacer nada y que la factura de la fiesta de las eléctricas la paguen las familias».

 

En el debate representó a la Comisión Europea la titular de Energía, Kadri Simson, que avanzó que el Ejecutivo comunitario prevé presentar una propuesta de reforma del mercado de gas europeo que incluirá medidas sobre almacenamiento y seguridad del suministro antes de que acabe el 2021.

 

Simson confirmó que el Ejecutivo comunitario está al tanto de las diferentes ideas que han propuesto algunos países europeos y, aunque no mencionó específicamente la propuesta española, sí puso como ejemplo la idea de «formas de compra conjunta de reservas de gas de emergencia».

 

En el debate, Simson explicó también que entre las medidas que Bruselas presentará la semana que viene para que los Estados miembros puedan hacer frente a los incrementos en el precio de la energía figurarán algunas reducciones fiscales en esta área o pagos directos a las personas que están más en riesgo de pobreza energética.

 

La Eurocámara reclama rapidez y unidad ante la escalada del precio de la energía