jueves. 26.12.2024

Baleares, Madrid o Murcia están entre las regiones de la OCDE en las que más cuesta proporcionalmente la vivienda, aunque todavía tienen que dedicar una parte más importante de sus ingresos los habitantes de California, la región de Dublín y, en particular Jerusalén.

En un informe publicado este viernes sobre diferencias regionales, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) explica que de media las familias tienen que dedicar alrededor del 20% de sus ingresos a la vivienda, aunque ese porcentaje se puede duplicar con creces en algunas áreas urbanas.

En España, la media es del 26,3%, aunque hay tres comunidades autónomas en que se supera el listón del 30%: Baleares (30,4%), Murcia (30,2%) y Madrid (30%). Luego ya viene Cataluña (27,1%).

En el otro extremo, las autonomías para las que hay datos y en las que el esfuerzo económico para la vivienda es menor (eso incluye el crédito para la compra o el alquiler, así como los gastos de mantenimiento como el agua, la electricidad, el gas y otros carburantes) son Galicia (20,3%) y Asturias (20,5%).

En otros países, ese costo puede subir hasta algo más de la mitad de la renta disponible, como en Jerusalén (el 39,7% de media en Israel), el 36,3% en el área urbana de Ginebra (Suiza) o el 35,3% en California (EE.UU.).

Los autores del estudio señalan que en los diez últimos años, los precios de la vivienda en la OCDE han subido mucho más en las grandes ciudades (un 68% en las de más de 1,5 millones de habitantes o un 50% en las de entre 250.000 y 1,5 millones) que en las pequeñas (un 37% en las que tienen de 100.000 a 250.000 habitantes y un 16% en las de menos de 100.000).

Eso se traduce en que el precio en las áreas urbanas de más de 1,5 millones de habitantes es un 68% superior al de las ciudades de entre 250.000 y 1,5 millones y un 86% más alto que en las de menos de 100.000. La brecha ha crecido de media en 20 puntos porcentuales en los últimos cinco años.

Las mayores diferencias, según el tamaño de las ciudades, se dan en Hungría, Corea del Sur y Estados Unidos.

En España, el precio de la vivienda en las ciudades de más de 1,5 millones de habitantes es un 31% superior a la media del país, y del 11% en las que van de 250.000 a 1,5 millones.

Frente a eso, en las áreas urbanas de entre 100.000 y 250.000 habitantes se sitúan un 15% por debajo de la media y un 26% por debajo las de menos de 100.000.

La evolución de los precios ha sido muy desigual desde la crisis financiera que supuso el pinchazo de la burbuja financiera. Entre 2013 y 2022 subieron de forma muy pronunciada en Málaga (3,8% de media anual), Palma de Mallorca (3,7%), Igualada (al 3,7% anual de media), Arrecife (3,4%), Barcelona (2,9%), Madrid (2,7%) y Alicante (2,7%).

Por el contrario, en ese periodo cayeron en Zaragoza (0,1% anual), Murcia (0,3%), Santiago de Compostela (1,5%), Oviedo (2,4%), Zamora (3,2%), Mérida (4,5%) o Linares (4,9%). 

Murcia, entre las regiones de la OCDE donde más cuesta la vivienda