Estos días concluyen las tareas de siega de arroz en Calasparra, dentro de una campaña en la que está previsto cerrar con alrededor de 2,5 millones de kilos de producción, tras haber sembrado 525 hectáreas, lo que consolida el incremento experimentado en 2019.
El consejero de Agricultura, Antonio Luengo, que visitó el coto arrocero, calificó el arroz de Calasparra como “uno de los principales embajadores de la Región, por su más que acreditada calidad y por su permanente búsqueda de la excelencia en todo el proceso productivo, que quedó plenamente confirmada con la puesta en marcha de Arroz Innova”.
El arroz de la DOP Calasparra alcanzó unas cifras de exportación el pasado año de cerca de 423 toneladas, y un importe de 555.000 euros, lo que representa, aproximadamente, un 20% de la producción, con Estados Unidos como principal destino de forma destacada, seguido por el Reino Unido y Portugal.
El titular de Agricultura recordó que “estamos ante el primer arroz del mundo que contó con el aval de calidad que representa la Denominación de Origen Protegido (DOP), lo que da buena idea de la importancia que este producto tiene para nuestra Región y de las razones para que el Gobierno regional lo tenga muy en consideración”.
A este respecto, Luengo recordó que la DOP fue subvencionada el pasado año con más de 86.000 euros, y que el Servicio de Sanidad Vegetal de la Consejería ha llevado a cabo actuaciones en el coto para la eliminación de los problemas fitosanitarios, como la implantación del método de confusión sexual a lo largo de 500 hectáreas de cultivos para combatir al barrenador del arroz, lo que ha supuesto una inversión a lo largo de los tres últimos ejercicios de 40.000 euros.
En el marco del Grupo Operativo Arroz Innova se han sembrado cuatro parcelas experimentales, donde se ha observado un ahorro efectivo de un tercio de semillas, “como un primer paso para la mejora de la productividad y la calidad de los cultivos en un 25%, y la reducción en un 50% del uso de fertilizantes”. Para las actividades de Arroz Innova se concedieron algo más de 165.500 euros en tres anualidades.
Además, desde la DOP y Arroz Innova están trabajando en potenciar los subproductos agroalimentarios derivados del cultivo y procesado del arroz, como la cáscara o la paja, para su aplicación en sectores específicos como el envasado o como fuente de sustratos fertilizantes y de energía con carácter renovable, lo que incide en un aprovechamiento máximo del cultivo y una economía circular.
La DOP está constituida por tierras de cultivo ubicadas en los términos municipales de Calasparra y Moratalla, en la Región de Murcia, y de Hellín, en la provincia de Albacete, con una superficie inscrita de unas 1.000 hectáreas, de las cuales, debido a la rotación con otros cultivos, se suelen sembrar anualmente entre 500 y 700.
El cultivo del arroz de Calasparra no consume prácticamente agua, ya que en todas y cada una de las parcelas del coto arrocero el agua fluye en todo el ciclo de cultivo, desde los canales y acequias hasta el río, una característica que lo hace diferente a otros arroces, que se cultivan en aguas estancadas.
