El presidente de la Coordinadora de Agricultores y Ganaderos (COAG) en la Región, Miguel Padilla, ha reconocido este miércoles que "no hay mano de obra suficiente" para la recolección y el manipulado de las cosechas y que eso ha provocado una “ralentización y lentitud de la producciones” y la sensación de que el sector va “frenado”.
En declaraciones a EFE, Padilla ha explicado que detrás de las dificultades para encontrar mano de obra se encuentra la "situación de estrés" provocada por la pandemia de Covid-19 y "el miedo" al contagio, aunque en el campo se están adoptando todas las medidas de seguridad.
Según Padilla, se está cumpliendo "rigurosamente" con las órdenes de sanidad y con las distancias de seguridad en el transporte de los jornaleros y en las plantaciones, mientras que en las cadenas de los almacenes de manipulado el personal se ha reducido a un tercio para evitar los contagios.
Estas “dificultades propias de la situación que tenemos” se han traducido en una mayor lentitud de todos los procesos para garantizar la máxima seguridad, aunque ese hecho no ha impedido que la producción llegue con puntualidad a los lineales de los supermercados de España y de toda Europa, ha dicho el presidente de COAG.
“No hay ningún problema de desabastecimiento. Se está sirviendo con dificultades, pero todo está llegando a los puntos de venta”, ha afirmado antes de recordar que la crisis del Covid 19 comenzó a dos meses para terminar la campaña de invierno que incluye toda la producción de hortalizas y al principio de la planificación de la campaña de verano, que incluye la plantación de sandía y melón.
La entrada en la campaña de fruta de hueso, que requiere mucha mano de obra, también preocupa a la organización agraria, que se enfrenta a una coyuntura es “difícil, complicadísima” y en la que “se legisla de un día para otro”.
En el sector primario “no todo funciona bien” en esta crisis del coronavirus, ha relatado Padilla, que ha citado la flor cortada “del que vivían muchas familias en la Región y que prácticamente está en la ruina” como consecuencia de las restricciones del estado de alarma.
También se ha referido el presidente de COAG al sector de la carne, como el de la producción de cabrito afectado por el cierre del canal HORECA de hoteles y restaurantes en toda España y ha afirmado que hay varias queserías pequeñas de la Región que se abastecían de leche de cabra y que han tenido que cerrar.