Su presidente, Juan Marín, ha dicho a Efe antes de la asamblea que se trata de un presupuesto “conservador”, ya que la actividad de la institución está condicionada por “la falta de agua”.
El organismo de riego dispondrá de 62 hectómetros de volumen agua durante este ejercicio, en el que la comunidad mantendrá sus tres precios de agua este año, con 47 céntimos de euro por metro cúbico para la del regadío consolidado, 47 céntimos la del sobrecupo y la del cupo 28, procedente del embalse de Puentes y del trasvase Tajo-Segura.
Solo habrá una pequeña bonificación para un grupo de regantes del regadío tradicional con una rebaja de dos céntimos para los que han hecho inversiones en el riego por goteo.
Desde diciembre ha aplicado restricciones en el suministro de agua de riego por la sequía y la ausencia de aportaciones del trasvase Tajo-Segura en el regadío consolidado y en el tradicional.
Marín ha dicho que esas restricciones se mantendrán al menos durante tres meses más y ha agradecido “el gran esfuerzo de los agricultores” durante este período.
A la asamblea de los regantes ha asistido el alcalde de la ciudad, Fulgencio Gil, que ha reconocido la “preocupación” del ayuntamiento por la situación de falta de agua “y los recortes del trasvase Tajo-Segura”.
Gil ha advertido que se trata de “un problema grave” y que “la desalación ni mucho menos puede suplir la carencia de caudales”, por lo que el trasvase es “fundamental para la supervivencia de toda la industria agroalimentaria de Lorca y de su comarca”.
En la asamblea el alcalde también ha adelantado que el consistorio tiene “muy avanzadas” cuestiones de orden urbanístico para permitir a la comunidad edificar en el solar contiguo a su sede en la calle Alpochones, que inicialmente en el planeamiento estaba contemplado como zona verde.
