La futura plaza orientada al mar de La Manga del Mar Menor, que se ubicará en el entorno del hotel Galúa, dotará de un nuevo espacio de descanso y disfrute junto al mar para revitalizar el litoral de este entorno, que cuenta con un paisaje privilegiado y un alto valor natural y paisajístico.
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Este espacio, situado en primera línea de costa, se transformará en un mirador que abrirá la zona urbana hacia el mar, mejorando así las posibilidades de paseo y accesibilidad de los miles de vecinos, turistas y visitantes de la Manga.
“Con esta plaza al mar, vamos a revitalizar la fachada marítima de La Manga acorde con las exigencias de calidad y accesibilidad que queremos para este enclave, así como potenciar su valor natural y dinamizar la vida social y comercial”, subrayó el director general de Transportes, Costas y Puertos, José Ramón Díez de Revenga, quien presentó este proyecto a los vecinos y empresarios de La Manga.
Diez de Revenga señaló que esta actuación “es muy demandada por los habitantes de La Manga para dar solución a los problemas de accesibilidad a la costa, que carece de paseos marítimos y de espacios de relación en gran parte de su extensión”, y resaltó que, además, “contribuirá a dinamizar una zona con un importante volumen de turistas”.
La plaza al mar en el entorno del Galúa, que supondrá una inversión de más de 1,2 millones, forma parte del programa de actuaciones incluida en el proyecto de ‘La Manga 365’ y que está cofinanciada por la Comunidad Autónoma y el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), en un 80 por ciento, porque es una manera de hacer Europa.
Es la primera actuación que trata de configurar un paseo marítimo en La Manga, muy demandado por vecinos y turistas. Su finalidad es ir conectando los distintos tramos de paseo que existen inconexos para dar continuidad a los itinerarios peatonales para el disfrute de los visitantes.
MIRADORES. La actuación consiste en la remodelación del entorno del hotel Galúa para adecuarlo como una plaza al mar, que fomentará la apertura hacia la costa del entorno urbano, integrando los espacios libres entre las edificaciones y las distintas infraestructuras, mejorando así su calidad paisajística.
Se construirá una serie de plataformas-miradores que propician la estancia y las vistas de la mayor parte de La Manga desde la zona rocosa junto al hotel Galúa, cuya cota es la más elevada y está situada junto a la escollera existente. Estos miradores estarán unidos entre sí y podrán llegar hasta la arena de la playa gracias a unas tarimas de madera.
De este modo, la plaza al mar conectará las calles Camino Proa y Camino Rompiente para dar continuidad a la zona de paseo. En Camino Proa se permitirá el tráfico rodado de una manera controlada y en el vial Camino Rompiente se habilitarán aparcamientos junto a los edificios, al objeto de liberar el espacio ocupado actualmente por los coches junto a la costa.
También se instalarán elementos de sombra, como pérgolas y arbolado, islas vegetales, al tiempo que se mejorará la iluminación y se renovará el mobiliario urbano.
Los trabajos se desarrollarán sobre una superficie total de 6.750 metros cuadrados, de los que 5.900 corresponden a plazas y viarios y el resto, 850 metros cuadrados, a pasarelas de madera que dan acceso directo a la arena.