Las ejecuciones hipotecarias de viviendas en la Región de Murcia se redujeron en un 46,1% en 2020 respecto al año anterior, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En concreto, en 2020 se procedió al embargo de 1.109 inmuebles (416 de personas físicas y 693 de personas jurídicas) para su venta tras el impago de un crédito en la comunidad murciana, mientras que el año anterior esa cifra ascendió a 2.055.
En conjunto, se ejecutaron las hipotecas de 2.505 fincas el año pasado en la Región, lo que representa un descenso del 42,13% respecto a 2019.
En Murcia, las ejecuciones hipotecarias en el último trimestre de 2020 ascendieron a 430, de las cuales 43 eran sobre fincas rústicas, 252 afectaban a viviendas, 15 a solares urbanos y 120 a otra tipología de finca urbana.
En España, se embargaron para su venta tras el impago de un crédito un total de 18.903 viviendas, lo que supone una caída del 31,24% respecto a 2019, mientras que las ejecuciones hipotecarias de todos los tipos de hipoteca fueron el año pasado 34.750, un 38,8% menos que en 2019.
Comunidad Valenciana (4.643), Andalucía (3.538) y Cataluña (3.492) registraron el mayor número de ejecuciones sobre viviendas en al año 2020. Las comunidades con menos fueron Navarra (61), País Vasco (102) y La Rioja (148).
Las autonomías con mayor número de certificaciones por ejecuciones hipotecarias sobre el total de fincas en 2020 fueron Comunidad Valenciana (7.579), Andalucía (6.257) y Cataluña (6.181). Por su parte, Navarra (116), País Vasco (178) y Extremadura (375) registraron el menor número.
Las ejecuciones hipotecarias, o embargos de una propiedad para su venta tras el impago de un crédito, en viviendas habituales, se redujeron un 29,3% en el cuarto trimestre de 2020 en comparación interanual, según los datos publicados este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Traducido a cifras, las ejecuciones hipotecarias iniciadas en los registros de la propiedad sumaron 8.648, lo que supone un 56,3% más que el trimestre anterior, añaden los datos.
Entre las viviendas de personas físicas con ejecución hipotecaria, 1.8041 son habituales en propiedad (un 82,2% más que en el mismo trimestre de 2019) y 501 no son residencia habitual de los propietarios (un 39,1% más).