Pedro Sánchez no ha logrado ser investido este domingo presidente del Gobierno, pues aun cuando ha obtenido más votos a favor que en contra en el Pleno del Congreso, concretamente uno más, no ha alcanzado la mayoría absoluta que exige la Constitución para el primer intento. Su elección ha quedado pendiente para una segunda votación, el próximo martes, 7 de enero.
La sesión de este domingo ha sido mucho más bronca que la primera del sábado. En el hemiciclo se han podido escuchar gritos y vivas a España en una jornada que ha despertado todas las críticas la intervención de la portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurua., defendiendo, incluso la legitimidad de Otegui, criticando su prisión y exigiendo el acercamiento de los presos etarras al País Vasco. Este ha sido el momento más tenso.
En los escaños se ha dibujado un mapa de España dividido en dos, entre los escaños de la coalición de izquierdas que aupará a Sánchez a la presidencia del Gobierno el martes y los banquillos de PP, Cs Vox, y el resto de partidos constitucionalistas.
La Constitución prevé una segunda vuelta, que deberá tener lugar a las 48 horas, cuando ya sólo hará falta tener más votos a favor que en contra. Será el próximo martes, día 7, no antes de las 12.45 del mediodía.
En concreto, el líder del PSOE ha recabado el apoyo de 166 diputados: 120 del PSOE, 34 de Unidas Podemos (ha faltado una parlamentaria de En Comú por enfermedad), seis del PNV, tres de Más País-Equo-Compromís y los otros tres que suman los representantes de Teruel Existe, Nueva Canarias y Bloque Nacionalista Galego (BNG).
Por contra, el bloque del 'no' ha sumado 165 escaños: los 88 del PP, los 52 de Vox, los 10 de Ciudadanos, los 8 de Junts per Catalunya, los dos de la CUP, los otros dos de Unión del Pueblo Navarro (UPN), uno de Foro Asturias, otro del Partido Regionalista Cántabro (PRC) y uno más de Coalición Canaria, cuya diputada Ana Oramas decidió este sábado romper la disciplina de su partido, que se había decantado por la abstención.
En la votación, pública y por llamamiento, ha habido también 18 abstenciones de los 13 diputados de Esquerra Republicana (ERC) y los cinco de EH Bildu. El candidato del PSOE ha obtenido un voto menos de los previstos inicialmente debido a la ausencia por enfermedad de la diputada del grupo de Unidas Podemos Aina Vidal, aunque no ha tenido influencia en el resultado.
SE OLVIDÓ DE LA REGIÓN. El presidente en funciones Pedro Sánchez no mencionó en ningún momento de su discurso de investidura ni en las posteriores réplicas a los diferentes grupos políticos de la oposición a la Región de Murcia, ni ninguno de los temas que más centran la actualidad política y económica de esta comunidad autónoma. Así, de su boca no salió referencia alguna a asuntos tan candentes como el Trasvase Tajo-Segura ni al estado del Mar Menor.
Por el contrario sí que mencionó (de hecho, centró buena parte de su discurso) a Cataluña, que fue gran protagonista de la sesión inicial de la investidura. También otras comunidades, con representación parlamentaria a través de partidos nacionalistas o regionalistas a los que Sánchez ha solicitado apoyo para llegar a La Moncloa sí que tuvieron consideración especial, como ocurrió con Aragón (Teruel), Andalucía, Madrid, Cantabria, Canarias, Comunidad Valenciana, Galicia, Asturias o, por supuesto, el País Vasco.
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Pedro Sánchez también pasó de puntillas sobre los temas que más interesan en la Región, como el agua. Ni una sola mención a los trasvases, como el Tajo-Segura, aunque sí que anunció un plan nacional de reutilización del agua. El presidente se refirió al recurso hídrico como " un derecho humano y no como un bien mercantil". Al menos, en esta ocasión, el jefe en funciones del Ejecutivo evitó la referencia a la necesidad de que las cuencas hidrológicas deben ser autosuficientes, algo que sí dijo en la investidura fallida de julio, y que provocó gran alarma en el sector agrícola de la Región.
El único que mencionó el asunto de los trasvases fue el líder de Vox, Santiago Abascal, quien denunció que a la Región se la ha dejado sin agua. Posiblemente debido a sus buenos resultados en las pasadas elecciones generales, la Región de Murcia sí que estuvo muy presente en varias ocasiones en el discurso del líder de esta formación política.
En el PP, la representación murciana estuvo comandada por el secretario general del partido, el ciezano Teodoro García Egea, quien ocupó su escaño al lado del líder del partido, Pablo Casado, con quien se le vio dialogando continuamente durante la maratoniana sesión.
No hubo mención alguna ni por parte del presidente en funciones ni de ningún otro representante parlamentario de la situación de contaminación del Mar Menor.
Sí que anunció una medida largamente demandada por el Gobierno murciano en los últimos años: la reforma de la financiación autonómica. El Ejecutivo de Fernando López Miras ha denunciado en numerosas ocasiones que Murcia es la comunidad peor financiada de España junto con la Comunidad Valenciana.
Otro anuncio que puede ser muy relevante para la Región es el apoyo a las energías renovables, y, en concreto, el objetvo de que España alcance en 2050 un 100% de energías renovables, algo que puede beneficiar en los próximos años a un sector, el fotovoltaico, que lleva años creciendo de manera exponencial en Murcia.
EL DEBATE DE INVESTIDURA, POR TEMAS:
- Economía: derogación de la reforma laboral, subida del SMI, pensiones al IPC y nuevas medidas contra el fraude fiscal.
- Política autonómica: nueva financiación, más participación de las autonomías en el Estado... y el "conflicto político catalán".
- Desigualdades: Elevar las rentas más bajas, ingreso mínimo vital y redistribución de la riqueza.
- Transición ecológica: Ley de Cambio Climático, bienestar animal y economía circular"en primera línea" del Gobierno.
- Energía: bono social del gas, autoconsumo y movilidad sostenible.
- Educación: Derogar la Lomce, Pacto por la Universidad, medidas contra el fracaso escolar...
