El primer parque tecnológico especializado en el agua, impulsado por la empresa murciana Caudal y ubicado en Puerto Lumbreras, ya es una realidad. La primera de las cuatro fases del proyecto está terminada y funcionando a pleno rendimiento. En esta parte de la obra se han llevado a cabo una serie de actuaciones enfocadas a construir la planta solar fotovoltaica, a habilitar la primera de las naves, a ampliar la capacidad de almacenamiento y a acondicionar todo el entorno.
Pedro González, CEO de Caudal, destaca que “una de las grandes novedades que presenta es que integra todas las actividades que, de manera transversal, se implican en la producción de los sistemas de riego: energía, materia prima, procesos industriales, adaptación al mercado... Esta forma de trabajar, coordinada y en un mismo lugar, es algo único en el mundo”.
Uno de los grandes hitos completados es la creación de la planta solar fotovoltaica que permite que sea autosuficiente. De momento, se han instalado más de 3.000 módulos con los que se va a generar 1.7 MWh de energía verde. Esta capacidad irá creciendo de la mano del parque para adecuarse a sus necesidades.
Otra de las acciones ya completadas es la construcción de una nueva nave industrial. Equipada con la última tecnología y adaptada a las necesidades del sector del riego en todas sus vertientes, este espacio amplía la capacidad de Caudal para personalizar su oferta con nuevas referencias de producto, también dirigidas a particulares.
“Esta iniciativa nos va a permitir trascender del modelo industrial clásico que solo valora producto, precio y servicio a otros más amplio, alineado con la sensibilidad actual de consumidores más comprometidos y, por tanto, más exigentes”, ha añadido Pedro González.
Acondicionamiento del entorno
Dentro de esta primera fase, además, se ha ampliado la campa de almacenamiento de producto terminado, que ahora cuenta con 70.000 metros cuadrados, y que permitirá agilizar la gestión del stock disponible. Y han comenzado los trabajos para contar con una estación experimental de 18.000 metros cuadrados, diseñada para probar, simulando condiciones reales, los nuevos desarrollos antes de que salgan al mercado.
Junto a lo realizado en el interior, Caudal también ha acometido obras en el entorno, en suelo de dominio público. En concreto, se han realizado intervenciones como el desdoblamiento de la vía de servicio que colinda con el parque, el encauzamiento de la Rambla del Fraile o la mejora de los accesos del camino de Góñar.
Más de 400.000 metros cuadrados dedicados al agua
El parque tecnológico se espera que esté terminado en 2030. En total, contará con 400.000 metros cuadrados, estará respaldado por una inversión de 30 millones de euros y consolidará unos 500 empleos.
Dentro del mismo, dedicado a investigar y producir sistemas de riego sostenibles, se van a ubicar todas las firmas de Grupo Caudal, que operarán en un entorno que facilitará el desarrollo de proyectos compartidos en los que la economía circular será el eje de cualquier actuación.
Además, el 25% del espacio estará disponible para la entrada de empresas y ‘startups’ dedicadas a cualquier aspecto de la cadena de riego, desde la materia prima, los servicios o la logística especializada a la innovación.