El presidente del grupo de presión Ferrmed, Joan Amorós, aseguró este miércoles que España carece de una planificación "adecuada" del transporte combinado de mercancías que sea además acorde con los objetivos de la Comisión Europea (CE), que quiere lograr que para 2030 el 30% del tráfico vaya por ferrocarril.
"Este no es sólo un problema de España, en otros países (de la Unión Europea) pasa lo mismo, pero hay que invertir con criterios medioambientales y socioeconómicos", remarcó Amorós a los medios de comunicación en Bruselas, donde ha presentado las conclusiones finales del estudio de Ferrmed sobre el transporte intermodal, elaborado entre 2019 y 2023.
Según el informe, España debe priorizar su inversión en el corredor del Mediterráneo, desde la frontera francesa hasta Murcia, así como en el corredor del Ebro entre Barcelona, Tarragona y Zaragoza, y en la conexión de Irún con Madrid, que son las zonas que identifica con un mayor tráfico de mercancías.
Para ello, Amorós pidió contar con una infraestructura adecuada que evite los cuellos de botella y criticó que los trenes de mercancía en Barcelona estén entrando por las líneas de cercanías, destinadas al transporte de pasajeros, ya que, a su juicio, pueden saturarlas.
"Que los ferrocarriles de mercancías en la zona de Barcelona entren por líneas de cercanías no tiene pies ni cabeza. Es incompatible (...) estamos al límite de la saturación", explicó Amorós.
Europa necesita un "cambio radical" en su red ferroviaria
El informe de Ferrmed concluye que la Unión Europea (UE) debe cambiar "radicalmente" la manera en que funciona su red ferroviaria para desarrollar 18.000 kilómetros de transporte combinado de mercancías y cumplir con las metas climáticas de la UE.
El presidente de la organización, que presiona para que corredores ferroviarios unan los puntos con más tráfico del sur y el norte de la UE, abogó por canalizar las inversiones hacia estas regiones para mermar el impacto medioambiental del tráfico rodado de carga.
"El transporte terrestre de mercancías ocasiona casi 300 millones de toneladas de CO2 al año. Lo que hay que hacer es invertir donde tenemos el tráfico más importante en las carreteras", remarcó Amorós.
El informe señala que estos 18.000 kilómetros de transporte concentran el 65% del tráfico y es donde, según Ferrmed, "se obtiene el 101% de resultados socioeconómicos y medioambientales".
Por ello, Amorós reclamó que la UE invierta 77.000 millones de euros adicionales -sobre los 481.000 millones identificados por los Estados miembros- de aquí a 2030 para lograr un sistema integrado de transporte por carretera.
"Hay que hablar siempre de una integración total del sistema de transporte terrestre. No podemos hablar del ferrocarril por un lado y, por otro, de las carreteras. Los dos son necesarios, pero hay que integrarlos de una manera óptima", dijo a la prensa.
Esta inversión adicional, consideró Amorós, se debe destinar principalmente a la creación de 425 nuevas terminales en Europa para absorber la circulación de mercancías y pasajeros, que se espera que aumente a medida que se avance en el objetivo de Bruselas de aumentar el tráfico ferroviario.
En 2021, el transporte total de mercancías en el club comunitario fue de casi 2,4 billones de toneladas-kilómetro, de las que cerca del 77% se transportaron por carretera, el 17% por ferrocarril y el 6% por vías navegables interiores.
El estudio advierte de que el impacto de los vehículos pesados de carretera en el medioambiente es "grave", ya que libera alrededor de 210 millones de toneladas de CO2 al año -lo que representa el 26% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero del transporte por carretera en su conjunto-.
Por tanto, piden a la Comisión Europea elaborar un plan de inversiones prioritarias que tenga en cuenta las conclusiones del informe y que de la "máxima prioridad" de desarrollo a las áreas donde hay un mayor flujo de transporte de mercancías.