Cartagena dispone ya de la hoja de ruta que deberá seguir para alcanzar el objetivo de renovar su modelo turístico y hacerlo más integrador, accesible y seguro, respondiendo a los retos actuales del sector, en particular a los relacionados con los efectos de la crisis del covid-19, e impulsando un desarrollo sostenible alineado con la Agenda 2030 y los ODS de Naciones Unidas.
Su diseño es el resultado de un proceso de participación en el que han colaborado entidades públicas, representantes de la cadena de valor del sector turístico y los vecinos de la ciudad.
El programa de trabajo se concreta en el Plan Estratégico de Turismo Sostenible de Cartagena 2022-2025, financiado por la Comunidad Autónoma, que este martes presentó el consejero de Turismo, Marcos Ortuño, junto con la alcaldesa de la ciudad, Noelia Arroyo.
El documento se articula en 59 proyectos que parten de tres ejes de actuación: la diversificación de productos turísticos e impulso de la imagen de destino multioferta; el impulso del marketing turístico; y el programa de gobernanza turística.
El primero de ellos propone medidas como incorporar el concepto de ‘bienestar’ al turismo de sol y playa; crear una oficina de captación y organización de actividades y eventos deportivos (Sports Bureau); Cartagena Sabor Mediterráneo; poner en valor los puertos pesqueros, las tradiciones marineras y la almadraba de la Azohía; así como crear dos portafolios, uno de productos y experiencias orientadas a los cruceristas, y otro relacionado con el turismo educativo e idiomático.
El segundo eje, el marketing turístico, tiene como objetivo reforzar la identidad de Cartagena como destino de referencia en cuanto a turismo patrimonial y natural, además de consolidar la personalidad de ciudad mediterránea y abierta, moderna y creativa, innovadora y sostenible. Para ello, será indispensable crear una nueva marca y orientar las acciones a los públicos objetivos prioritarios.
CLUBES DE PRODUCTO. Por último, la gobernanza turística prevé renovar el modelo de gestión del turismo, aprobar un pacto local por un turismo sostenible y crear clubes de producto como MICE (Convention Bureau), Deportivo (Sports Bureau) y Gastronómico. Asimismo, se recomienda organizar un servicio de ventanilla única para los servicios de captación y gestión de eventos musicales (Music Office) y de producciones audiovisuales (Film Office).
“Es el primer plan estratégico de la era postcovid. Un documento elaborado junto al sector que marca los grandes objetivos estratégicos de nuestro turismo y los programas necesarios para alcanzarlos. El Plan estratégico marca el nuevo camino que debemos recorrer juntos las administraciones y el sector turístico”, ha dicho la alcaldesa, Noelia Arroyo
El consejero hizo hincapié en “el enorme empuje turístico de la Comarca del Campo de Cartagena que concentra más de un tercio de las plazas de alojamiento de la Región, genera de forma anual 1.300.000 pernoctaciones, y sumó 251.000 cruceristas en 2019, antes de que se paralizara la actividad por la pandemia”.
Además, añadió Ortuño, “destaca la diversidad de su oferta vacacional y cultural, sus playas y entornos naturales y su legado de más de 3.000 años de historia, lo que evidentemente convierte a la ciudad en una auténtica capital del turismo, que ahora dará, sin ninguna duda, un enorme paso delante de la mano de este plan estratégico”.
COSTA Y CIUDAD HISTÓRICA. Por otra parte, la hoja de ruta 2022-25 contempla la puesta en marcha de 59 programas de desarrollo turístico distribuidos en cuatro temáticas: Costa de Cartagena, Ciudad Histórica, Campo de Cartagena y Bahía de Cartagena.
Así, en la costa propone, entre otras actuaciones, ejecutar un Plan de renovación Integral de La Manga del Mar Menor; un Plan de intervención integral en Cabo de Palos que permita preservar la estética de pueblo marinero y sus valores, y mejorar sus conexiones y servicios; además de crear paseos ecológicos en la zona del Mar Menor y La Manga.
Las propuestas para la ciudad histórica incluyen un Plan de Renovación del Paisaje Urbano y continuidad de las políticas de rehabilitación y activación del patrimonio arqueológico, junto con el Plan de Revitalización Comercial impulsando un eje comercial que conecte con el Ensanche de Cartagena, la potenciación del Puerto de Cartagena, la ‘humanización’ de la calle Gisbert y puesta en valor del Mercado, además del Plan de intervención integral en el Barrio de Santa Lucía.
La rehabilitación y puesta en valor del patrimonio arqueológico, industrial e inmaterial de la Sierra Minera es la herramienta esencial para el impulso turístico del Campo de Cartagena, mientras que la Bahía identifica como elementos necesarios para su renovación el cumplimiento del plan director de los fuertes y baterías defensivas y el Proyecto de Faro a Faro.