Los establecimientos extrahoteleros de la Región, que engloban a los alojamientos de turismo rural, apartamentos, cámpines y albergues, registraron en 2022 la cifra de 380.632 viajeros, lo que supone la mejor cifra anual desde que se tienen datos y un 19% más que en 2019, frente al incremento del 4,5% en España, según las estadísticas de ocupación del Instituto Nacional de Estadística (INE).
El número de viajeros nacionales, 281.005, aumentó un 22%, el doble que en el conjunto del país, y el de extranjeros, 99.629 personas, creció un 11,5% respecto a 2019, mientras que en España se produjo un descenso del 3%.
Estos turistas generaron 2.275.486 pernoctaciones, un 7% más que en 2019, lo que también representa la mejor marca anual para pernoctaciones extrahoteleras.
El consejero de Turismo, Marcos Ortuño, apuntó que los mayores incrementos se han dado tanto en “apartamentos turísticos, cuyo número de viajeros se ha disparado un 50% respecto al último año prepandemia, hasta los 166.684, como en los cámpines, que han superado en un 17% (155.909) los datos de viajeros de 2019”.
Ortuño explicó que estas dos modalidades, que han marcado récord histórico anual de viajeros desde que se tienen datos, se han visto potenciadas tras la irrupción de la pandemia, como consecuencia de “los nuevos hábitos del turista, que busca más independencia y privacidad en entornos que pueden ser urbanos, costeros y próximos a parajes naturales”.
Por otra parte, el conjunto de alojamientos turísticos, tanto los hoteleros como los extrahoteleros, registraron el pasado año una afluencia total de 1.688.218 viajeros.
Este dato supone un incremento del 0,6% respecto al año 2019, lo que contrasta con el descenso en España del 3,5% para el mismo indicador.
