La ocupación hotelera de la Región registró en el año 2017 una media del 49,2%, lo que supone un retroceso de cuatro décimas frente al año anterior (49,6% en 2016). A pesar de este retroceso, este año se han registrado más pernoctaciones que el año anterior, pero el retroceso se debe a que a lo largo del último año han abierto nuevos hoteles o se han reabierto otros que antes permanecían cerrados. De esta manera, ha habido más pernoctaciones, pero al haber más camas disponibles, la proporción ha bajado ligeramente.
De hecho, hasta noviembre, la cifra de viajeros había aumentado en la Región un 6,2%, en parte por el 'efecto Caravaca', hasta llegar a los 1,2 millones.
CRECIMIENTO RALENTIZADO. En el conjunto del país, las pernoctaciones en establecimientos hoteleros alcanzaron la cifra de 340 millones en el conjunto del año pasado, lo que supone un incremento interanual del 2,7%, que se sitúa 4,7 puntos porcentuales por debajo de la tasa de crecimiento del 7,4% registrada en 2016.
Durante diciembre pasado, se produjeron 16,1 millones de pernoctaciones, un 1% más que en el mismo mes de 2016, una de las subidas mensuales más débil, junto con la de octubre, del 1,1%, y las bajadas del 2% en febrero y del 7,4%, en marzo.
Las pernoctaciones de viajeros nacionales aumentaron un 6,1% en diciembre, mientras que las de extranjeros disminuyeron un 2,5%.
Cataluña, cuyo turismo se vio afectado por la inestabilidad política, tras el referéndum independentista del 1 de octubre, sufrió en diciembre caídas del 14,5% en las pernoctaciones extranjeras y del 4,8%, en las españolas.
En el conjunto del ejercicio, la comunidad registró un aumento del 4,2% en estas últimas y un descenso del 0,8% en las nacionales, una tasa de decrecimiento inferior a la de otros principales destinos de este mercado como Andalucía, con una caída del 3,6%, y la Comunidad Valenciana, con una del 2,4%, frente a un repunte del 1,4%, en la de Madrid, según la Coyuntura Turística Hotelera difundida hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
TURISTAS INTERNACIONALES. En cuanto a los turistas internacionales, por delante de Cataluña, con un 18% de las pernoctaciones de este mercado, se situaron Canarias y Baleares, con un 28% y un 24,2% del total y aumentos del 1,9% y del 0,7% y, respectivamente.
En 2017, los extranjeros aumentaron un 3,7% sus pernoctaciones, mientras los españoles un 0,7%. Los viajeros españoles, que representaron un 48,5% del total, realizaron el 33,8% de todas las pernoctaciones hoteleras en 2017.
Por su parte, a los británicos y los alemanes les correspondió casi la mitad de las pernoctaciones realizadas por extranjeros, a pesar de que las de los primeros descendieron un 0,8%, frente a un repunte del 1,5% de los segundos, tras descensos de ambos mercados en diciembre, del 5,2% y del 8,7%.
En 2017, los siguientes países emisores fueron Francia, con un 3,8% de noches menos (en diciembre la caída fue del 11,9%); Holanda, con un 10% más, e Italia, con 1% más (un 7,6% menos en diciembre).
Los crecimientos más significativos de pernoctaciones en 2017 los experimentaron los viajeros de Rusia, con un repunte del 18,3%; EEUU, con el 14,9%, y Suecia, con el 11,2%.
BALEARES, LÍDER. La ocupación media alcanzó el año pasado el 61,1% de las plazas ofertadas, con un aumento del 2,2% respecto a 2016, presentando Baleares la mayor tasa, con el 78,9%.
En 2017, del total de pernoctaciones, el 75% se concentró entre los meses de abril a octubre.
Los precios hoteleros registraron el pasado año una subida media del 6,4%, lo que supuso 0,9 puntos más que la tasa experimentada en el ejercicio anterior.
Las comunidades autónomas que presentaron las subidas medias más altas fueron Baleares (del 8,6%), Canarias (8%) y la Comunidad de Madrid (7,8%).
En cuanto a la rentabilidad, la facturación media diaria de los hoteles por cada habitación ocupada (ADR) fue de 87,3 euros (5,3 euros más que en 2016), mientras el ingreso medio diario por habitación disponible (RevPAR) alcanzó los 58,7 euros (4 euros más).
Por categorías, la facturación media fue de 190,4 euros para los hoteles de cinco estrellas; de 93,8 euros, para los de cuatro; y de 71,6 euros, para los de tres estrellas, con aumentos en todas ellas.
Los ingresos por habitación disponible para estas mismas categorías también crecieron hasta los 132,1, 71,0 y 51,3 euros, respectivamente.