Una de las señas de identidad más características de España es la pasión por el deporte. El deporte es una de las facetas favoritas de los españoles, no solo para entretenerse, sino también para disfrutar entre amigos y para sentirse parte de un colectivo mayor. Ya sea apoyando al equipo de nuestra ciudad, organizando un partido con amigos o siguiendo los avatares de los deportistas españoles más destacados, muchos de nosotros encontramos en estas actividades un sentimiento de pertenencia muy necesario.
Quizás estos sean los principales factores que explican por qué el deporte sigue siendo, a día de hoy, uno de los contenidos más seguidos, y una de las formas de entretenimiento por antonomasia en nuestro país (así como en el resto de los países de nuestro entorno). Quizás sea por esa vía también por donde descargamos de forma pacífica algunas de nuestras tensiones, o lo que nos permite conversar con amigos y desconocidos sin que los temas a tratar levanten asperezas insalvables (como ocurriría si hablásemos, por ejemplo, de política).
Pero ¿qué deportes vemos los españoles? ¿Cuáles son las disciplinas más seguidas? ¿Ha cambiado algo con respecto a los últimos años o de las últimas décadas? ¿Nos interesamos por los mismos deportes? ¿Los consumimos de la misma forma? Vamos a responder a todas estas preguntas que nos desgrana este artículo de ExpressVPN.
Lo primero que hay que decir es que, el fútbol, de largo, sigue siendo el deporte rey en nuestro país. Es el que más seguimiento tiene, el que más recursos mueve, y el que más capacidad de movilización logra. Por supuesto, la Liga española y el resto de las competiciones en las que participan equipos de nuestro país (ej. Champions League, UEFA, etc.), son las más seguidas, aunque también existe un seguimiento importante de otras ligas europeas (Premier, League 1, Calcio, Bundesliga…). El fútbol tiene un peso importante en todos los estratos de la sociedad, pero es especialmente fuerte entre los mayores de 40 años, menos familiarizados que los jóvenes con los nuevos formatos, que permiten acceder a una variedad mucho mayor de contenidos deportivos y una mayor diversidad de disciplinas.
Precisamente entre los jóvenes se empieza a despertar un interés por disciplinas alternativas cuya popularidad está creciendo gracias al aumento de las plataformas de visionado de contenido deportivo por streaming. Deportes tan diversos como el surf o la escalada (por mencionar solo un par de ejemplos) han aumentado su importancia en los últimos años gracias a esa mayor cobertura que reciben. También se puede apreciar un aumento en la importancia de deportes extranjeros como el béisbol o el fútbol americano debido a la expansión de internet y de la cultura americana.
Otros deportes mayoritarios como el baloncesto o tenis siguen siendo importantes para los aficionados al deporte en nuestro país. En el caso de estos deportes, la participación y los éxitos de los deportistas españoles suelen marcar los hitos más importantes a nivel de audiencia y repercusión mediática. Algunos ejemplos son las fechas en las que tenistas como Rafael Nadal o Lucas Alcaraz participan en los abiertos más importantes del circuito tenístico, o cuando el equipo nacional de baloncesto ha tenido citas europeas o mundiales. Algo similar ha ocurrido en los últimos tiempos también con algunos deportes del mundo del motor como la fórmula 1 o las motos: la aparición de figuras nacionales de renombre en estas disciplinas (los Fernando Alonso, Carlos Sainz, Marc Márquez y compañía), hacen que el interés por estos deportes suba exponencialmente.
Cabe predecir, por tanto, que la tendencia seguirá aumentando hacia una mayor diversidad en los gustos deportivos a medida que la oferta y la cobertura de disciplinas alternativas vaya creciendo. Es muy probable, sin embargo, que los deportes asentados como el fútbol sigan siendo protagonistas destacados en el panorama deportivo nacional, y que la disputa por sus derechos de visionado siga generando, como hasta ahora, auténticas pugnas comerciales. También cabe predecir que el éxito de los deportistas españoles seguirá marcando el sentido de la audiencia. En otras palabras: el streaming está cambiando los gustos, pero al fútbol y al patriotismo deportivo, de momento, nada ni nadie tiene pinta de que vayan a sacarles de su pedestal.