El tratado de libre comercio (TLC) entre Singapur y la Unión Europea entra en vigor este jueves, con España entre los países con más amplio margen de beneficio y con vista a servir de modelo para futuros pactos de la UE con otros países del Sudeste Asiático.
El comercio bilateral entre el bloque y la ciudad-estado supera los 53.000 M€ (58.700 millones de dólares), lo que convierte a Singapur en el principal socio de la UE en la región, además de ser el principal destino de las inversiones europeas en el Sudeste de Asia.
Singapur, uno de los países con mayor renta per cápita del mundo, sirve de centro de operaciones regional para más de 10.000 empresas europeas, más de un centenar españolas de sectores como bancario, textil o el pujante sector de energías renovables, entre otros.
Las transacciones comerciales entre España y Singapur superaron en 2018 los 1.400 M€ (1.550 millones de dólares), una cifra favorable a España y que se augura mejorar este año, según datos del Instituto de Comercio Exterior (ICEX) de España.
"Para España este acuerdo puede servir para mejorar las cifras de comercio debido al amplio margen de mejora en sectores tradicionales y nuevos, y recortar terreno frente otros países más asentados en la región como Italia o Francia", declara a Efe el consejero jefe del ICEX en Singapur, Jose María Blasco.
El acuerdo elimina las tarifas a todos los productos europeos que entran en la ciudad-estado, mientras que la EU levantará de manera paulatina las tasas al 84% de las exportaciones singapurenses. Además de promocionar el comercio entre sectores como telecomunicaciones, ingeniería, informática, transporte marítimo o servicios medioambientales, por ejemplo.
Por otra parte, el consejero reveló que a raíz del acuerdo "percibimos un creciente interés por parte de empresas singapurenses por establecerse en España como puente hacia Europa".
Singapur también ha creado por primera vez una lista de productos agroalimentarios con indicaciones geográficas para proteger su comercio, entre ellos 26 españoles, como los vinos de Ribera del Duero, Penedès o Rías Baixas, prodúctos cárnicos de Jabugo o el queso Manchego.
El TLC con Singapur, uno de los 10 países miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), sirve, según analistas, como modelo para futuros acuerdos en la región.
"De lo que trata realmente el acuerdo es de preparar el camino de la UE hacia una integración más profunda con la ASEAN. El acuerdo de Singapur fue planeado como modelo para acuerdos posteriores con otros estados miembros de la ASEAN", indicó a EFE Deborah Elms, directora ejecutiva de la consultora Asian Trade Center.
La UE alcanzó este año un acuerdo comercial con Vietnam, que todavía está pendiente de ser ratificado, y mostró su voluntad a retomar las negociaciones de un TLC con Tailandia, tras celebrar en marzo las primeras elecciones tras el golpe de Estado de 2014.
En un momento de incertidumbre económica mundial marcada por las posiciones proteccionistas entre EEUU y China, este tipo de acuerdos supone una apuesta por la estabilidad.
"Estos acuerdos pueden proporcionar una certeza útil para las empresas, al mantener abiertas las rutas comerciales y los flujos de inversión en movimiento. Para las economías dependientes del comercio, esto es críticamente importante", apuntó Elms.