viernes. 22.11.2024

La patronal murciana CROEM ha valorado el "balance favorable" del paro en 2023 en esa región con 6.000 desempleados menos y 14.500 nuevos trabajadores ocupados, por casi 2.500 y 12.200 afiliados más, respectivamente, que en 2022, "que se sustentan en la fortaleza de la actividad terciaria" del sector de los servicios.

Además, se dio una mayor estabilidad laboral, dado que casi seis de cada diez nuevos contratos fueron indefinidos, cuando el promedio español fue de cuatro.

En consecuencia, aunque la dinámica resulta ligeramente menos favorable que la que se venía registrando antes de la pandemia de covid, la contrastada resiliencia del mercado laboral constituye un buen punto de partida ante el proceso de desaceleración económica que muy posiblemente afrontará la Región de Murcia a lo largo de 2024

Perspectivas inciertas

Por su parte, de cara al año que comienza, la Cámara de Comercio de Murcia destaca la coincidencia por parte de los expertos en unas perspectivas de desaceleración económica global, aunque la economía española tendrá un mejor comportamiento que el contexto internacional.

En este sentido, persisten amenazas globales como los elevados tipos de interés, que provocan un aplazamiento o paralización de nuevos planes de inversión; una inflación que se resiste a ceder; niveles de deuda muy elevados que operan como lastre financiero para familias, empresas y administraciones; y, además, un escenario de riesgos geopolítipos crecientes.

Esta situación tendrá su impacto en el mercado laboral nacional y regional, donde es previsible que disminuya la intensidad con la que se viene creando empleo y reduciendo el paro en los últimos años. Los empresarios subrayan la preocupación que genera el aumento de sus costes derivados de la inflación y los altos tipos de internes y, sobre todo, de la alta presión fiscal especialmente las cotizaciones sociales. Es necesario, en su opinión, que estas cargas se reduzcan para abaratar la contratación y favorecer así la creación de empleo.

En cuanto a las limitaciones propias de la actividad empresarial regional, continúan las amenazas sobre la disponibilidad de agua por una sequía persistente, en una economía tan dependiente de este recurso; así como la necesidad de financiar estructuras fundamentales para el incremento de la competitividad empresarial como el Corredor Mediterráneo.

También se señala la necesidad de intensificar los esfuerzos para fomentar la creación de empresas y el autoempleo, dado que los datos de afiliación a la Seguridad Social de 2023 ponen de manifiesto un descenso interanual del 0,5% en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos, frente al Régimen General, que aumentó un 2,9%.

Ello podría repercutir, además, en la creación de actividades lideradas por jóvenes como mecanismo para disminuir las dificultades de acceso al mercado laboral para el colectivo sin empleo anterior. Todo ello desemboca en un mercado laboral en desaceleración para 2024, aunque se logre mantener la creación de empleo, en un contexto de crecimiento económico moderado.

Los empresarios hablan de buen dato del paro en 2023 gracias a la fortaleza del sector...