La economía murciana continúa dinámica en los primeros meses de 2018 apoyada por la fortaleza de la demanda interna y una creación de empleo estable, según recoge el Boletín de Coyuntura Económica que elabora la Cámara de Comercio de Murcia.
La renta disponible de las familias y, por lo tanto, el consumo están contribuyendo a la prolongación de la actual fase expansiva de la economía murciana, con un crecimiento estimado del PIB durante el primer trimestre del 0,6%, situando la tasa interanual en el 3%. Este avance permite mantener las previsiones de crecimiento económico de la Región para el conjunto del año en la horquilla del 2,9 al 3,3%, en todo caso por encima de la estimación para el marco nacional.
Sin embargo, el servicio de estudios de la Cámara señala también que el ritmo expansivo de la economía regional podría verse moderado como consecuencia de la pérdida de poder adquisitivo derivada de los recientes aumentos de la inflación. El IPC en la Región se ha visto impulsado al alza, situándose en el 2,1% interanual durante el mes de junio sobre todo por efecto del encarecimiento del petróleo, aunque los precios en la Región siguen siendo los más bajos del conjunto de las Comunidades Autónomas.
La demanda externa también frena su vigor influida por las menores ventas de productos energéticos, mientras las del resto de productos moderan su avance. De hecho, y según los datos de la Secretaría de Estado de Comercio, las exportaciones murcianas de mercancías cayeron en los cinco primeros meses del año un 2,4% interanual, fuertemente condicionadas por los productos energéticos, que representan el 20% del total exportado y descendieron un 19,3%. De hecho, si quitamos los productos energéticos, las exportaciones crecen un 2,7%.
COMPORTAMIENTO POR SECTORES. Respecto a los sectores productivos, en agricultura persiste la escasez de agua estructural que sufre la Región, constatándose reducciones en algunas producciones agrícolas y, en general, aumentos en las ganaderas. Las ventas exteriores de frutas, hortalizas y legumbres, que representan el 35% del total exportado por la Región, aumentan un 0,6% hasta mayo; los productos cárnicos descienden un 0,6; y los pesqueros aumentan un 27,6.
La actividad industrial muestra un dinamismo superior al marco nacional, según el índice de producción industrial que avanza un 4,1% en los cinco primeros meses del año, frente al 2,7 nacional, principalmente por la producción de bienes intermedios. El empleo en este sector también refleja este dinamismo superando con contundencia los resultado del ejercicio anterior, concretamente un +7,1% en lo relativo al número de ocupados en el primer trimestre según la EPA y un +4,6 los afiliados a la Seguridad Social hasta junio.
La actividad en el sector de la construcción repunta en los primeros meses del año, sobre todo por la obra residencial, con notables avances tanto en las viviendas terminadas hasta marzo (+104,1%) como en las visadas hasta abril (+71,4%), aunque hay que tener en cuenta que se parte de magnitudes excepcionalmente bajas. También aumenta la compraventa de viviendas, con un crecimiento del 25,5% en los cinco primeros meses del año y con aumentos de precios (+2,7% en el primer trimestre), con mayor protagonismo de la vivienda usada aunque la nueva va ganando peso sobre el total de transmisiones. La licitación oficial también contribuye a la mayor actividad del sector, con un avance del 74,3% hasta mayo, según la patronal SEOPAN, impulsada sobre todo por las contrataciones de la Administración central.
Las actividades del sector servicios se han caracterizado por la estabilidad, fundamentalmente en las ramas del turismo y comercio. Así la cifra de negocio en el sector crece un 4,5% hasta mayo, superando levemente el avance de un año antes. Dinámica positiva pero más moderada muestra el índice de comercio al por menor que, sin tener en cuenta la incidencia de los precios, aumenta un 1,1%, más que en el año previo.
Los indicadores turísticos denotan solidez aunque algunos se moderan respecto al periodo previo, experimentando avances el número de viajeros y pernoctaciones en establecimientos turísticos del 1,7 y 2,1% respectivamente hasta mayo, logrando aumentar tanto el grado de ocupación hotelera como la estancia media. A esta evolución contribuyen de manera más acusada los turistas nacionales, ya que los extranjeros reducen su número de pernoctaciones respecto al año previo.
El tráfico de pasajeros en el aeropuerto de San Javier aumentó un 9,4% hasta junio, a diferencia del puerto de Cartagena, cuyos pasajeros disminuyen un 14,6 en los cinco primeros meses del año. Respecto al transporte de mercancías, el volumen transportado en el citado puerto se reduce un 0,5% interanual, mientras aumenta un 7,8 el de carretera con origen o destino en la Región durante el primer trimestre, según el Ministerio de Fomento.