El fondo de capital riesgo MCH Private Equity ha comprado el 30% de Prosur, una empresa murciana dedicada a las especias alimentarias, que ha sido valorada en cerca de 300 millones de euros. La noticia ha podido ser confirmada por Murciadiario.
El fondo dirigido por Jaime Hernández Soto y José María Muñoz se han impuesto en la puja a ProA Capital e Intermediate Capital Group (ICG), que se habían interesado por esta sociedad con un problema en el relevo generacional, según El Confidencial.
MCH ha acordado pagar unos 100 millones de euros por un tercio de Prosur, que fue fundada 1965 por Ginés Hernández, "fruto de una intensa experiencia acumulada en el sector de los ingredientes alimentarios". Empezó como mezclador de especias y preparados para la industria alimentaria. Cuando el mando de la empresa pasó a la segunda generación, Prosur diversificó su gama de productos y apostó por la investigación y el desarrollo, lanzando soluciones pioneras para el sector alimentario, según su descripción oficial. La empresa tiene un beneficio operativo de 20 millones, por lo que MHC ha pagado un múltiplo de catorce veces, un múltiplo elevado para la situación actual de crisis económica.
Pero la segunda generación, los hijos Juan De Dios y Elena Hernández, no ha terminado de entenderse, según fuentes próximas a la operación, por la que llegaron a interesarse más de veinte fondos. En un proceso dirigido por Deloitte, que ha tenido distintas fases y porcentajes distintos puestos en el mercado, Elena ha decidido vender la mayoría de su paquete accionarial para facilitar su salida y dejar a su hermano al frente del negocio.
La tensión interna ha sido tal que Juan De Dios se ha comprometido por escrito a recomprar ese 30% vendido por Elena Hernández dentro de unos años, pagando una rentabilidad mínima garantizada a MCH Private Equity. Un incentivo que provocó el interés de otros grandes fondos como Nazca y Portobello, que también presentaron ofertas vinculantes por Prosur. Finalmente, tras una dura puja en la final con ProA e ICG, MCH, asesorado por AZ Capital, se ha llevado el gato al agua.
Prosur tiene su sede en Murcia, "el jardín de frutos y vegetales de Europa. Su clima y geografía única producen productos de alta calidad que son una verdadera inspiración para nuestros científicos", asegura la nueva compañía de MCH. Una región que se ha convertido en una auténtica huerta para el capital riesgo español, en lo que se ha conocido como la fiebre del 'agrobusiness'.
De hecho, en septiembre de 2019, Sherpa Capital anunció la entrada en el accionariado de Omega Spice, empresa española líder en la producción y distribución de especias, hierbas y vegetales deshidratados para grandes empresas de alimentación. Fundada en 1998 y con sede en Archena (Murcia), Omega Spice es una empresa referente en el sector de especias contando con una clara vocación internacional, con más del 95% de las ventas en el exterior.
También Miura se convirtió en socio de Frutas Esther para crear un grupo alimentario, junto a Citrico&Co, con una facturación de unos 500 millones de euros. Y ProA entró en el accionariado de Moyca, la empresa de uva de mesa sin pepita que vende principalmente a supermercados del Reino Unido. Incluso ya en 2016, Portobello tomó una participación mayoritaria en Sabater Spices, otra empresa de especias.
Mirando incluso más atrás, Magnum, el fondo de Angel Corcóstegui, hizo unos de los negocios de su vida con la compra en 2013 de Iberchem, una empresa de fragancias que vendió en 2017 a Eurazeo por 400 millones de euros. También ha invertido también en un hospital en Cartagena y en una empresa de telecomunicaciones, Aire Networks.