Flexomed, empresa especializada en packaging para alimentación, ha conseguido el certificado CE como EPI en la lucha contra el COVID-19 para sus pantallas protectoras faciales. El certificado ha sido concedido por el laboratorio AITEX después de numerosos ensayos y conforme al reglamento UE-2020/403.
Estas pantallas denominadas 'Plus', y sus variantes 'Plus Ultra' y 'Plus Junior', ofrecen una protección ocular y facial total, cubren todo el rostro y protegen contra proyecciones líquidas (como por ejemplo la saliva que emitimos al hablar o toser) y salpicaduras de líquidos, grasa o productos de limpieza.
Están fabricadas sobre una base de cartoncillo de uso farmacéutico y con ventana de PET y ofrecen una visión de 180 grados; son ligeras, ergonómicas, reutilizables y no requieren el uso de instrucciones de montaje.
Como característica significativa cabe destacar su cierre de velcro y su almohadilla frontal reforzada en los modelos Plus Ultra y Junior, que las hace mucho más cómodas, favoreciendo la transpiración y su uso con gafas.
Se pueden imprimir, personalizar con distintos diseños o logotipos de empresas y, además, son accesibles para el público en general a través de Amazon o en la tienda online de Flexomed.
Flexomed cuenta con cuatro divisiones donde elabora envases flexibles, bolsas doy-pack, packaging digital y estuchería en cartoncillo.
Fue precisamente esta división la que se vio más afectada por el estado de alarma y donde perdió el 50% de su producción de estuches y cajas ante el cierre del canal impulso y el multiprecio.
Gracias a la puesta en marcha de la nueva división de EPIS de protección contra proyecciones líquidas y salpicaduras, se evitó hacer un ERTE y se ha incrementado la plantilla en 30 personas hasta llegar a los 130 trabajadores.
El departyamento de I+D+I de Flexomed anuncia nuevos lanzamientos, mascaretas para los más pequeños, la pantalla solar para el verano y la abatible que permitirá que la ventana se levante y se baje, pensada para los clientes y profesionales de la hostelería.
Si el mayor transmisor del COVID es la saliva y el mayor receptor los ojos, las pantallas faciales son parte del kit de protección individual indispensable para trabajadores y público en general, siendo un protector ideal al cubrir todo el rostro e impedir que se toque la cara en actos reflejos, además de un alarde de creatividad para adaptarse a las demandas del mercado y seguir en funcionamiento durante este momento de incertidumbre.