El porcentaje de ácidos grasos cardiosaludables del atún rojo de acuicultura aumenta considerablemente conforme los atunes pasan más tiempo en los viveros. Esta es una de las principales conclusiones del estudio que ha impulsado la Asociación Nacional de Acuicultura del Atún Rojo (ANATÚN) y el Grupo de Acción Local de Pesca y Acuicultura de la Región de Murcia, (GALPEMUR), y que ha sido realizado por Taxon Estudios Ambientales en las instalaciones que Grupo Ricardo Fuentes tiene en aguas de la Región de Murcia. En el proyecto han participado investigadores de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Murcia.
El principal objetivo del estudio ha sido conocer hasta qué punto la ubicación de la producción acuícola influye en la composición nutricional de los atunes, concretamente en lo relativo a ácidos grasos. Para ello se estudió esta composición en ejemplares capturados en la campaña de pesca de 2022 en el Mar Balear, así como en atunes alimentados durante varios meses en los viveros que el Grupo Ricardo Fuentes posee en San Pedro del Pinatar y El Gorguel.
Los resultados muestran que el porcentaje y concentración de ácidos grasos cardiosaludables en músculo aumenta con el tiempo, al menos hasta los 5 meses de estancia en los viveros, independientemente de la localización de aquellos. En este sentido, los ácidos grasos poliinsaturados Omega-3 fueron los que registraron un mayor incremento a lo largo del tiempo.
Por otro lado, el estudio revela la posibilidad de asociar la procedencia del atún rojo a uno u otro vivero en función de la concentración de dichos ácidos grasos y de la composición química del músculo (oligoelementos).
Diego Romero, profesor de la Facultad de Veterinaria y participante del estudio, señala que los resultados obtenidos “muestran con claridad la mejora que se produce en la calidad nutricional de esta especie tras su estancia en los viveros. Por ello, recomendamos mantener proyectos de investigación sobre la especie para mejorar el conocimiento sobre su fisiología, bienestar y trazabilidad”.
Este estudio cuenta con el apoyo del Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP) y la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, así como la colaboración de la Universidad de Murcia, ANATÚN, Taxon Estudios Ambientales, GALPEMUR y Grupo Ricardo Fuentes.
