El Colegio Oficial de Economistas de la Región presenta su Barómetro número 33 que recopila información de interés para el seguimiento de la situación económica.
Pese a que a lo largo de 2021 se consolidó la recuperación de la actividad perdida en el año de la pandemia, desde el primer trimestre de 2022 la situación económica se ha deteriorado, en buena medida por la guerra en Ucrania, las persistentes alteraciones en las cadenas de suministro y, sobre todo, por el fuerte repunte de la inflación, a causa del alza en los precios del petróleo, el gas y otras materias primas básicas.
Ante un panorama caracterizado por una extraordinaria incertidumbre el bloque referido a los Temas de actualidad se dedica a los riesgos crecientes y, en particular, a los ligados a la inflación.
En este complejo escenario, en el que se están registrando tasas de inflación no vistas en décadas y que ha provocado la revisión generalizada a la baja de las previsiones de crecimiento, es particularmente interesante conocer la opinión de los economistas.
La percepción general de la situación económica personal en los próximos seis meses respecto a la actual confirma una menor incidencia a la prevista inicialmente. Esta valoración se extiende a la situación de las economías regional, nacional y europea.
Se espera que los tres sectores más dinámicos en 2023 sean Nuevas tecnologías de la información y comunicaciones, Turismo, ocio y hostelería y Actividades sanitarias y de servicios sociales.
Desde diciembre de 2021, la situación económico-financiera actual de las empresas muestra un progresivo, aunque lento, deterioro. No obstante, la clara mejoría, tanto en la situación como en las expectativas, permite un apreciable repunte en la confianza.
Dentro del bloque de coyuntura, referido a la inflación y los riesgos crecientes, la mayoría de los colegiados considera “Probable” el riesgo de recesión en España en el próximo semestre y un 31,6% piensa que es “Alto” o “Muy alto”.
En el ámbito de la economía regional, la “Disminución del consumo”, la “Reducción del crédito” y la “Caída de la inversión” son las consecuencias derivadas de la subida de tipos que se consideran más relevantes.
Sobre los riesgos potenciales para la economía regional, los más probables son la “Caída del consumo” y una “Subida adicional de tipos de interés”, pero se descarta que haya un “Freno a las exportaciones”.
Una clara mayoría de colegiados considera que las previsiones de crecimiento del Gobierno de España son “Optimistas”, mientras 2 de cada 3 cree que las de la Región de Murcia son “realistas”.
Finalmente, aunque la contención de la escalada de precios deba pasar por el fin del conflicto, también se demanda un menor gasto público.