Las exportaciones de las empresas alimentarias y de conservas vegetales de la Región de Murcia caerán este 2019 un 5% con respecto a las cifras de 2018, según avanzó este martes, durante la asamblea general de la Agrupación de Empresas de Alimentación (Agrupal), su presidente, José García Gómez. Por otra parte, los envíos al extranjero de la Industria Alimentaria representan el 20% del total de las exportaciones no energéticas de la Región de Murcia.
En este sentido, García Gómez explicó que hay una importante reducción de la mandarina en almíbar, un producto “que venía elaborándose en la Región de Murcia y que ha desaparecido”, pero también por “una caída en melocotón y alcachofa, dos productos genuinamente murcianos”.
“Es verdad que el Brexit y las guerras comerciales no ayudan para nada, y la inestabilidad en la que vivimos menos todavía”, reconoció García Gómez, quien abogó por realizar un análisis de las causas que han provocado esta reducción de los envíos al exterior. ”Queremos conocer las razones con más detalle”, apostilló.
La Industria alimentaria supone un 35% de la industria de la Región de Murcia, con más de 24.000 empleos directos, y una producción por valor de 6.000 millones de euros. Se trata, subrayó el presidente de Agrupal, de un “sector estratégico”, que aporta más del 5% del Valor Añadido Bruto (VAB) regional.
Asimismo, García Gómez reclamó que en 2020 pueda ver la luz una vieja reivindicación del sector agroalimentario: la construcción de una nueva sede para el Centro Tecnológico Nacional de la Conserva y la Alimentación (CTC), ubicado en Molina de Segura.
Y es que, aseguró, “somos incapaces de poder dar respuesta a la demanda de las empresas porque se nos ha quedado pequeño”. A su juicio, el próximo año es una buena oportunidad para abordar la creación de unas nuevas instalaciones, por la apertura de un nuevo período de fondos europeos.
También se refirió al “clamor” del sector por la situación de la Cadena Alimentaria, sobre la que actualmente pesan tanto las presiones del sector productor, como “la enorme fuerza que tienen las centrales de distribución”, con el 80 por ciento concentrado en media docena de corporaciones.
Otra de las preocupaciones es la unidad del mercado, que el presidente de Agrupal calificó de “galimatías”. “Es imposible poner orden a lo que hay que hacer cuando se pone un producto en el mercado porque cada comunidad autónoma tiene su propia legislación”, reprochó García Gómez, para quien “todo apunta a que esto pueda empeorar”.
En cuanto al Brexit y las guerras comerciales, afirmó que los aranceles “son la herramienta que más nos perjudica” y llamó la atención sobre las consecuencias en las exportaciones del futuro eje Londres-Pekín-Washington, y posiblemente Moscú, por los posibles acuerdos comerciales que pudieran alcanzar al margen de la UE.
Finalmente, comentó que la industria alimentaria necesita un Plan Estratégico, con una hoja de ruta que recoja los principales desafíos de futuro, petición que trasladó al presidente de la Comunidad Autónoma, Fernando López Miras, quien asistió a la clausura de la Asamblea General de Agrupal.
GALARDONADOS. Durante el acto se entregó también una distinción a la empresa Hida Alimentación por su dilatada trayectoria profesional, y se nombró socio honorífico del Centro Tecnológico Nacional de la Conserva y Alimentación (CTC) a Luis Dusaac Moreno.
También recibieron las insignias de oro de Agrupal el Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats), que recogió su presidente Lucas Jiménez, por su 40 aniversario, así como el ex director general de Innovación, Producciones y Mercados Agroalimentarios, Fulgencio Pérez.
Con anterioridad, se firmó un convenio entre Agrupal y la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB), para reforzar el peso del tejido industrial del sector y actividades de internacionalización e I+D+i, entre otras. Seguidamente, el director general de FIAB, Mauricio García de Quevedo ofreció la conferencia ‘Perspectiva de la Industria de Alimentación y Bebidas. Retos y oportunidades’.
