La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen desgranó en una rueda de prensa las propuestas que va a realizar la Comisión para proteger a los consumidores del gran aumento de los precios de la energía.
Por un lado lo que denominó "ahorro inteligente de la electricidad". Los picos de consumo a determinadas horas impulsan el precio de la electricidad, ya que es durante estos picos de demanda cuando el gas más caro entra en el mercado. Lo que hay que hacer es aplanar esta curva y evitar los picos de demanda, para lo que se propondrá un objetivo obligatorio para reducir el uso de la electricidad en las horas punta.
También se propondrá un tope a los ingresos de las empresas que producen electricidad con bajos costes. Las fuentes de energía con bajas emisiones de carbono, como las renovables, están obteniendo ingresos inesperados, que no reflejan sus costes de producción, y de los cuales deben beneficiarse los consumidores.
Las empresas que producen energía con combustibles fósiles, petróleo y gas, también han obtenido beneficios masivos, por lo que se propondrá que contribuyan de modo solidario, y que los estados utilicen estos ingresos para apoyar a los hogares vulnerables e invertir en fuentes de energía limpia de producción propia.
También se propone apoyar a las empresas de servicios energéticos para que puedan hacer frente a la volatilidad de los mercados, contribuyendo a facilitar el apoyo a la liquidez por parte de los Estados miembros a las empresas energéticas.
Finalmente, se propondrá un tope para el gas ruso con el fin de recortar los ingresos de Rusia que Putin utiliza para financiar la guerra de invasión contra Ucrania.
Estas cinco propuestas serán debatidas con los Estados miembros en el Consejo informal de Ministros de Energía que se celebra el viernes.