El ayuntamiento de Cartagena ha incrementado en 100.000 euros la aportación municipal destinada a la Agencia de Desarrollo Local y Empleo (ADLE), alcanzando un total de 1.057.430 euros para 2025. Este aumento del 9% busca consolidar los programas formativos que ya están dando frutos en la inserción laboral de los cartageneros, a la vez que impulsa nuevas iniciativas para preparar a los empleados en sectores clave como la industria y el turismo, con un enfoque especial en las necesidades formativas detectadas por las industrias tractoras del municipio, según ha explicado Álvaro Valdés, concejal de Empleo.
El refuerzo del presupuesto, que ha sido aprobado este miércoles 2 de octubre por el Consejo Rector, permitirá a la ADLE mantener su apuesta por la formación dirigida a sectores estratégicos para Cartagena, como la industria y el turismo. En el primer caso, siguiendo las necesidades de la Mesa para la Formación para las Nuevas Industrias creada por el ayuntamiento. En particular, se ampliarán los programas de micro formación, diseñados en estrecha colaboración con las principales industrias de Cartagena, con el fin de adecuar la cualificación de los trabajadores a las exigencias de sectores como el naval, el metal y la construcción.
Para la formación en Turismo, uno de los pilares fundamentales será la expansión de la Marca Excelencia Cartagena, un programa que hasta ahora ha estado centrado en la hostelería, pero que, gracias a este aumento presupuestario, podrá extenderse al comercio. Este programa busca mejorar las competencias de los trabajadores de estos sectores, claves para el desarrollo turístico del municipio.
Otro de los aspectos destacados del nuevo presupuesto es el refuerzo de la formación descentralizada a través del programa Barrios ADLE. Tras los resultados obtenidos en iniciativas como el Programa Conecta en El Llano del Beal y el Programa Competencias TIC en Los Dolores, la ADLE ampliará su presencia en más barrios y diputaciones. Este enfoque permitirá acercar la formación a zonas periféricas y facilitar el acceso a colectivos con mayores dificultades para acceder a programas formativos centralizados.